Cuando nos disponemos a organizar nuestra cocina, una de las primeras decisiones que tenemos que tomar es donde almacenar los productos alimentarios.

Envases de almacenaje

Botes de almacenaje

En esta entrada hablaremos de aquellos productos alimentarios que compramos a granel y vamos consumiendo de forma progresiva, serían por ejemplo lentejas, pasta, arroz,harina, etc.

Descartemos, por tanto, latas, botes, botellas o cualquier otro envase que sea de un solo uso o que una vez abierto requiera refrigeración.

ESPACIO

¡Lo sabemos!, siempre estamos con lo mismo, pero es que irremediablemente es el primer factor que hemos de tener en cuenta.

Si contamos con una despensa todo será mucho más fácil, pero esto no siempre es así y por eso tenemos que partir de la base de que sólo contamos con nuestros armarios, más o menos espaciosos, de la cocina.

NUESTRA FORMA DE COMPRAR

Estamos seguras de que os sonará muchísimo. En la entrada COCINANDO SUEÑOS:ORGANIZANDO LA COCINA ARMARIOS tocamos el tema de la compra, porque va a condicionar, en gran manera, el uso que deis al espacio de vuestros armarios.

Si hacéis la compra con frecuencia, sólo comprareis un paquete de azúcar, por ejemplo.
Si hacéis la compra una o dos veces cada mes, probablemente caigan en vuestra cesta dos o más paquetes.

A veces compramos en demasía, acumulamos tal cantidad de envases que no dejamos respirar a los armarios, cuando los abrimos parece que van a estallar y tenemos que hacer auténticos malabares para que quepa todo con orden y una cierta estabilidad.

En la medida de lo posible, es conveniente hacer la comprar con mayor frecuencia y así, evitarnos el almacenaje de un número tan elevado de productos, aunque sabemos que esto no siempre es posible, por el ritmo de vida que llevamos o la lejanía de los establecimientos alimentarios.

NÚMERO DE CONVIVIENTES

A mayor número de personas, mayor número de productos, teniendo en cuenta que los productos también se consumen antes, no creemos que sea un factor demasiado prioritario.

BOTES DE COCINA

TAMAÑO

Respecto al tamaño de los envases es importante tener en cuenta su capacidad y los espacios que de ellos se derivan:

Si tenemos un bote demasiado pequeño no podremos volcar todo el contenido del envase original en él, por lo que acabaremos ocupando dos espacios, el del bote y el del envase original con la cantidad sobrante.

Si tenemos un bote tamaño estándar donde podemos volcar la totalidad del producto, nos vamos a encontrar con un problema: si no hacemos uso de una sola vez de su totalidad, para la siguiente vez os faltará producto, por tanto abriremos un nuevo envase y lo llenaremos hasta rellenarlo por completo, quedando de nuevo dos espacios, el bote y el nuevo envase original.

Es aconsejable, vaciar el bote hasta el final y una vez vacío rellenarlo de nuevo en su totalidad, así sólo ocuparemos un espacio.

Armarios: dónde guardarlos

Una buena idea es poner el bote de cocina en la parte delantera del estante y justo detrás el envase original, convenientemente cerrado con una pinza o bolsa zip. De esta manera siempre tendréis a mano el bote, pero también el envase para rellenarlo, además de tener controladas las existencias del producto para vuestra lista de la compra.

Estantes

Si tenemos botes colocados a la vista en estantes, no será posible jugar con el espacio trasero sobrante.

Nunca dejéis sueltos los envases, utilizad mejor una caja de almacenamiento para que no se dispersen por el armario o corran el riesgo de rasgarse.

Si tenéis la fortuna de tener una despensa o armario de almacenamiento, guardad ahí los envases originales no abiertos, y los que estén a medias en la caja que hemos mencionado.

ENVASES ORIGINALES

Una buena opción es mantener los productos alimenticios en sus envases originales, muy recomendable si vuestra cocina es pequeña.

Utilizad el mismo método que para el sobrante de los botes de cocina, recordad:

No los dejéis sueltos, siempre en cajas de almacenaje.
Clasificadlos por categorías o por frecuencia de uso.
Es importante que queden bien cerrados para evitar su deterioro o que aparezcan insectos en su interior.
Si tenemos estantes los botes de cocina quedarán muy decorativos, pero también pueden quedar estupendas unas cajas de almacenaje con vuestro toque de creatividad.

Os dejamos algunos ejemplos:

Plástico, ordenadas por similitud.

En este caso no están adornadas pero se pueden forrar de un papel que os guste y quedarán muy originales. Recordad plastificarlas para que no se estropee con los vapores de la cocina.

Cajas de madera

Hablando de originalidad aquí tenéis una buena muestra: una de nuestras caracolas es muy mañosa y con las cajas de madera de los fresones ha creado unos contenedores chulísimos.

Todo está lleno de ideas: libros, internet, las casas de tus amigas, las tiendas.

Hazlas tuyas y deja volar tu creatividad.

En El Caracol Organizado no nos cansaremos de decir, que tu organización debe estar acorde con un uso razonable de tu economía, por eso:

Mira a tu alrededor, a veces tenemos en casa recipientes, cestas, envases que puede servirnos como almacenamiento.
Ahora quien mas, quien menos compra por internet. Podemos reciclar las cajas y envases para almacenar productos.
¿Alguna vez os han regalado en reyes un kit de cremas y productos para el aseo personal?, normalmente vienen dentro de recipientes con formas variadas y elegantemente decoradas que pueden servir para nuestro propósito de organizar.
Las cestas y cestillos son fantásticos para organizar. Material apto para nuestra salud, con un montón de tamaños, y aún siendo fáciles de tunear con pintura o tela, en la mayoría de las ocasiones no es necesario ya que de por sí son bonitas.

Y para terminar este, esperamos útil artículo, hablemos de algo que El Caracol Organizado siempre trata desde la seriedad que el tema supone, pero también desde el respeto a la elección y el criterio de cada uno: los materiales de los envases de almacenamiento.

MATERIALES

Actualmente hay a vuestra disposición un sinfín de botes de cocina de distintos materiales, si bien es cierto que a veces lo más recomendables, lamentablemente son los más caros y no están al alcance de todo el mundo.

Ahora veamos algunos materiales, la lista no es exhaustiva, os recomendamos un paseíto por internet para ver distintas opciones, eso sí, como siempre os decimos a la hora de valorar y tomar una decisión preguntad o consultad a los expertos.

No hagáis caso de las opiniones de los no expertos, en los blog estamos para ayudar, dar ideas o compartir experiencias pero no por eso nos convertimos en expertos, científicos o estudiosos en la materia.

BAMBÚ

No contamina, crece rápidamente, es inocuo para nuestra salud, muy resistente y elegante.

Es una muy buena opción para la cocina, para guardar los productos alimentarios, los accesorios de cocina, los cubiertos, las tablas de cortar…

CERÁMICA

Si mezcláis de de distintos tonos, os va a quedar un almacenaje bonito a la vez que elegante y original.

Su principal inconveniente es la fragilidad.

Ojo con los esmaltes, aunque algunos no están permitidos es fácil que los tengan y pueden ser perjudiciales para nuestra salud.

ACERO INOXIDABLE

Un toque de moderna originalidad en la cocina.

Hay alguna polémica ya que, en ocasiones, pueden contener pequeñas cantidades de metales pesados, así que recomendamos que os asesoréis convenientemente antes de de adquirirlos.

VIDRIO

El borosilicato, por su resistencia y ausencia de materiales tóxico en su composición, es el tipo de vidrio más indicado.

También podemos reciclar los envases de vidrio de otros alimentos: una vez vacíos, lo lavamos bien y listos para reusar. Esta idea no es nueva, nuestras abuelas y madres solían hacerlo. Algo barato, práctico y respetuoso con el medio ambiente al dar una segunda oportunidad al producto.

PLÁSTICOS

Tienen una numeración en función de su procedencia, que es conveniente conocer ya que no todos son seguros para su uso. Por tanto, antes de adquirir cualquier recipiente u objeto de plástico comprobad el número (tiene que venir inscrito en el mismo) y mirad en la lista el tipo de plástico que es y el grado de toxicidad que puede llegar a tener.

Recomendable es también comprobar que el libre de BPA. Eso significa que es libre de Bisfenol A, un componente químico tóxico muy utilizado hace décadas.

PLA: los plásticos son materiales que derivan del petróleo, sin embargo el PLA o ácido Politáctico es un plástico hecho a partir de las plantas, por tanto no tóxico y biodegradable.

CONSEJOS A LA HORA DE UTILIZAR LOS BOTES DE COCINA.

Transparencia

La luz estropea los alimentos, de hecho si leéis las recomendaciones de cualquier envase os aconsejará mantenerlo fuera de exposición a la luz.

Si tenéis vuestros botes de cocina en estantes es mejor optar por un material translúcido, que no deje pasar la luz a su contenido.

Hay personas que optan por un material con terminado transparente para poder identificar su contenido, nada más sencillo que crear unos pequeños carteles y sabremos en todo momento que bote elegir.

Cierre hermético

Lo dicho para el material de los botes de cocina se puede trasladar a sus cierres. Tened en cuenta que también van a estar en contacto con los alimentos.