En la entrada LAS ESTACIONES DE LA ROPA (III): Organizar por bloques, hemos planificado la organización del cambio de temporada a partir de tres (si incluimos la ropa de entretiempo) o cuatro bloques coincidentes con las cuatro estaciones del año.
BLOQUE PRIMERO: INVIERNO
Dentro del bloque de invierno vamos a hacer una subdivisión en base a la temperatura: más o menos frío.
Finalidad
Conseguir tener siempre disponible la ropa adecuada y evitar los amontonamientos de ropa, que aún siendo de temporada, todavía no nos la vamos a poner.
Os dejamos unos cuantos ejemplos del tipo de ropa y accesorios que podrían ir en cada bloque, pero como siempre decimos todo dependerá de cada persona y estilo.
- El bloque de ropa de invierno para temperaturas más frías solo se usará una vez.
- El bloque de invierno para temperaturas más suaves se usará dos veces: al principio y al final del invierno.
Este matiz es importante a la hora de su almacenamiento ya que el segundo tendrá que guardarse en un lugar más accesible que el primero.
BLOQUE SEGUNDO: VERANO
En este bloque volveremos a hacer una subdivisión en función de la temperatura: más o menos calor.
Nos vamos a remitir a lo dicho en el bloque del invierno, ya que la finalidad y el ¨modus operandi¨ es el mismo.
Os dejamos algunos ejemplos de prendas y accesorios que podrían ir en cada grupo,
La ropa de baño y sus accesorios:
El incluir este tipo de prendas y accesorios en el bloque de más calor o bien almacenarlo de forma independiente, va a depender de tres cosas:
- Espacio: Si contamos con poco espacio, es posible que en un primer momento optemos por almacenarlo en el mismo bloque, pero al final si lo pensáis el volumen es el mismo: en un bloque más grande o dos más pequeños.
- Volumen: Si tenéis multitud de bañadores o biquinis, junto a todo tipo de complementos playeros o de piscina, tal vez sería interesante almacenarlos formando un nuevo bloque de ropa de baño.
- Frecuencia de uso a lo largo del año: Si en Navidad o Semana Santa hacemos una escapadita a climas más tropicales, conviene almacenarlo de forma independiente para tenerlo más a mano.
De nuevo a la hora de almacenar la ropa de verano os remitimos a lo dicho en el bloque de invierno.
Recordad, la ropa y accesorios para la época de menos calor la almacenaremos en un lugar más accesible ya que haremos uso de ella dos veces, al principio y al final de verano.
BLOQUE TERCERO Y CUARTO: OTOÑO Y PRIMAVERA
En estas estaciones podemos elegir entre dos opciones en función de nuestras necesidades:
- Si utilizamos la misma ropa en otoño y primavera haremos un sólo bloque, que habremos de almacenar en un lugar bastante accesible, ya que haremos uso del mismo dos veces al año.
- Si nos gusta cambiar de colores y estilos en cada una de las estaciones, tendremos que recurrir a dos bloques de ropa diferentes que almacenaremos separados y utilizaremos una sola vez cada uno.
Muchas veces las estaciones de primavera y otoño se acaban fusionando con el principio y fin de verano e invierno, teniendo temperaturas muy similares.
Esta situación podría hacernos pensar en la conveniencia de unir bloques para simplificar la tarea, no es este nuestro criterio, ya que se trata de dividir en el mayor número de bloques las prendas para evitar fallos como el amontonamiento o la falta de disponibilidad.
BLOQUE SORPRESA: EL ¨POR SI ACASO¨: LA ROPA DE RETÉN.
El tiempo a veces está completamente loco y nos puede brindar con un sol espléndido durante el más crudo invierno o una tormenta heladora durante unos días en verano, por eso conviene tener siempre a mano un par de prendas (no más), de cada temporada, pero sobre todo de otoño y primavera.
Estas prendas nos acompañaran durante todo el año y así siempre estaremos preparados haga el tiempo que haga.
El Caracol Organizado 